Cariño, no te folles a tu hermana, que ya estoy aquí




Joder, no podía ser que el marido se retrasara un poco en el trabajo, y la zorra de su mujer se estuviera liando en la cocina… ¡con su propia hermana! No sabía qué clase de crianza habían tenido estas dos hermanas tetonas. Pero estaba claro que en su casa eran muy liberales con respecto al sexo. Pero a pesar de eso, al tío no le hacía nj puta gracia que su mujer le pusiera los cuernos en su propia casa. Así que, como no podía echar a la puta de su cuñada, cortó por lo sano y acabó follando con las dos. Y como eran dos hermanas tan compenetradas, estas maduras eran la combinación perfecta para un trío de sexo.

categorias:
publicado:

textoinferior